Más que una casa, esta villa es un estado de ánimo. Recientemente renovada con un diseño cuidado hasta el último detalle, combina a la perfección la esencia de Ibiza: yoga por la mañana, champán por la noche. Luz natural, amplitud y una estética limpia se funden con el entorno de pinos mediterráneos y vistas al mar, creando un refugio ideal para quienes buscan desconexión sin renunciar al estilo. Ubicada entre acantilados y vegetación, a pocos pasos de Cala Molí, una de las playas más encantadoras y auténticas de la isla, esta propiedad ofrece un ambiente de paz, elegancia y libertad. Con amplias zonas exteriores para relajarse al sol, piscina privada rodeada de naturaleza, espacios abiertos para compartir con amigos o familia, y un interior luminoso y sofisticado, esta villa invita a vivir Ibiza de la forma más auténtica: sin prisas, sin estrés, simplemente disfrutando. Ideal para quienes eligen la calma sobre la prisa. Ideal para quienes sienten que Ibiza es su hogar.